Ayer el sol quemaba, hoy lluvia empapándolo todo. Varios volcanes erupcionan casi simultáneamente, uno el más temido del planeta, está en Indonesia, no hace mucho provocó un gran tsunami, fue el año 2018, aunque en el 1883 su erupción provocó cerca de 40.000 muertes, su erupción causó un gran tsunami, y el volcán desapareció parcialmente bajo el mar.

María C.Betanzos | 12 abr 2020

Ayer el sol quemaba, hoy lluvia empapándolo todo.
Varios volcanes erupcionan casi simultáneamente, uno el más temido del planeta, está en Indonesia, no hace mucho provocó un gran tsunami, fue el año 2018, aunque en el 1883 su erupción provocó cerca de 40.000 muertes, su erupción causó un gran tsunami, y el volcán desapareció parcialmente bajo el mar.
En 1927 volvieron las erupciones y años más tarde apareció la isla de Anak Krakatau, que en el idioma indonesio significa hijo de Krakatoa.
Desde entonces Anak Krakatau ha despertado con grandes rugidos que solo asustaban, hasta el 2018 que despertó con más ímpetu y su furia causó el gran tsunami de Indonesia.
Los geólogos creen que algún día Anak Krakatau despertará con la misma furia que lo hizo el Krakatoa en 1883.
Mientras Anak Krakatau volvió a rugir y a expulsar llamaradas de fuego el viernes noche y sábado por la mañana, otro gigante se desperezaba a 15.326 km. de distacia, el Popocatépetl en México, registró una explosión la noche del viernes y la mañana del sábado, aunque esta vez el Popocatépetl solo expulsó cenizas.
Y no sólo el Popocatépetl, otros seis volcanes más despertaron en Indonesia a la llamada de Anak Krakatau, Monte Kerinci, Monte Merapi, Semeru, Ibu y Dukono generaron una explosión.
En América además del Popocatépetl, también registraron actividad volcánica Sangay en Ecuador, Sabancaya en Perú y los Nevados de Chillán en Chile.
Los especialistas afirman que no hay conexión entre ellos y que puede considerarse una coincidencia…
Y creo que me he dispersado, yo solo quería hablar del tiempo, que ayer salí a tomar un poco el sol al patio y quemaba, y esta tarde llueve con alegría.
Pero leo volcán y solo veo lava y rocas incandescentes.

(foto de el periódico La Nación)