Cabo Beach incumple claramente la Ley de Costas, el Ayuntamiento de Cartagena avala la construcción, otorgando una mas que dudosa licencia, por supuesto fiscalía está investigando.
Isabel | 4 ago 2021
Denunciamos públicamente un“supuesto” delito urbanístico que se está cometiendo en una cala conocida como Cala Descargador y Arco de Cala Flores, en la zona costera de Cabo de Palos, zona que pertenece al Ayuntamiento de Cartagena. Toda esta zona de costa debería estar especialmente protegida ya que, por un lado, está la reserva marina de Cabo de Palos y, por otro lado, es una zona de anidación de la tortuga boba (en el Parque Regional de Calblanque). Hemos visto cientos de veces cómo la actividad humana es totalmente incompatible, en la mayoría de casos, con la protección del medio ambiente, por lo que en estas zonas debería limitarse al máximo la población humana. Esto se consigue, entre otras actuaciones, limitando las edificaciones, sin embargo, en este caso se está haciendo lo contrario.
En la Calle de la Isla 45, había antiguamente una construcción obsoleta que llevaba abandonada muchos años. Como se puede ver en el croquis catastral, dicha construcción se encontraba en el margen izquierdo de la parcela, la parte más separada de la costa, el resto era salvaje y constituía la ladera del acantilado, ladera que ha desaparecido por las excavaciones de la obra.
La Ley de Costas es bastante clara. En la costa no se puede construir. En general, no se podrá construir nada nuevo en una franja de 100 metros desde la línea de costas y en cualquier edificación existente solo se podrán realizar las actuaciones mínimas para su conservación. Por lo que, en este caso, lo máximo que se podría haber hecho es remodelar la antigua edificación.
La empresa promotora de esta obra bautizada como “Cabo beach”, Carin Poulissen, ha conseguido una, cuento menos, dudosa licencia para construir 13 apartamentos con garajes, trasteros y piscina. Dicha construcción incumple claramente la ley de costas, ya que algunos linderos de la urbanización no van a estar ni a 10 metros del límite interior de la ribera del mar. Teniendo en cuenta que según la ley no se puede construir a menos de 100 metros de dicho límite, las cuentas no salen.
Es gracioso leer en la web de Carin Poulissen hablar de “lujo responsable” y decir que: “en cabo Beach tratamos a nuestro planeta con el mayor respeto”. No sé si destruir la costa es de ser muy responsable, por no decir, que solicitar una licencia de obra a sabiendas de que esta no cumple con las distancias mínimas legales, es significativo de una falta absoluta de ética, la misma falta de ética que por otra parte adolece el concesor de dicha licencia, el Ayuntamiento de Cartagena.
A pesar de las varias denuncias interpuestas en el Ayuntamiento de Cartagena y de que incluso la fiscalía de Cartagena esté investigando este asunto, la obra sigue avanzando. La Consejería de Medio Ambiente de Murcia también es conocedora de este asunto y a pesar de decir en un principio que clarísimamente estaba incumpliendo las leyes medio ambientales, la respuesta final que ha enviado por registro se limita a decir que dicha construcción tiene licencia. Hasta ahí llegamos, la cuestión es que esa licencia no se ajusta a la ley y por lo tanto debería revocarse.
¿Acabarán la obra cómo ocurre con otros delitos urbanísticos que no son paralizados a tiempo y luego son difícilmente complicados de demoler?
Es intolerable que a día de hoy se sigan cometiendo estas tropelías a sabiendas de todas las partes responsables. Beneficio de unos pocos que se llevan “regalitos de color negro” a costa del futuro medioambiental del planeta, y por ende, de todos.
Fuentes externas:
El Latido 
Deja un comentario