Iremos desde muchos puntos del país. Nos encontraremos allí para hacernos oír y apoyar a Teresa Vicente, que defenderá está Iniciativa Legislativa Popular

Israel Buendía | 14 mar 2022

El paseo con mensaje que iniciamos hoy lunes 14 de marzo de 2022, es muy pero que muy especial.

Salimos desde Ampuero, Cantabria, hacia Madrid. Viajaremos de noche para amanecer allí. Iremos a las puertas de nuestro (sí, nuestro) congreso de los diputados (y de vez en cuando, imputados) para apoyar esa ILP que dotaría de personalidad jurídica al maltrecho Mar Menor.

Iremos desde muchos puntos del país. Nos encontraremos allí para hacernos oír y apoyar a Teresa Vicente, que defenderá está Iniciativa Legislativa Popular.
También aprovecharemos para encontrarnos y compartir lo vivido en estos dos años y pico frenéticos de movilización y concienciacción ciudadanas en torno al Mar Menor.

Y todo hay que decirlo: se ha arrancado, de nuevo, un motor social que marcha y ruge imparable, poniendo contra las cuerdas, en ocasiones, a ejecutivos locales, regionales y nacionales.
Ya pasó, no hace mucho, con las luchas por el soterramiento de las vías del tren a su paso por Murcia. Y lo conseguimos, tras décadas de promesas y mentiras electorales.
Al final la ciudadanía, tras las movilizaciones pertinentes, consiguieron en un par de años de intensa presencia en calles, medios e instituciones, lo que no habían hecho nuestros políticos en décadas.

Junto a otras cuantas causas activas (pensiones, sanidad, educación, etc.) esta marea movilizadora ha adquirido una magnitud y potencia inusitadas, siendo ejemplo claro y fiel de lo que significa «participación ciudadana».

Sin participación activa y continua, no hay representación democrática posible y/o sostenible.

Y bueno, sólo queríamos recordarles, y recordarnos, la importancia de la acción continua y coyuntural que ha de caracterizar nuestro día a día, como ciudadanía y como humanidad que aprende haciendo y equivocándose, acertando y recordando…

Somos responsables de cada paso, cada decisión y cada consecuencia que ello genera. Cuesta muchísimo coger el ritmo, pero no por ello es imposible.

Cada logro, cada avance y retroceso en esta inmensa y poliédrica lucha social por un Mar Menor Vivo, ha costado el tiempo, la energía, el dinero, la ilusión y la paciencia de mucha gente que ha hecho posible que, a día de hoy, marchemos a Madrid a ver cómo allí se retratan aquell@s que trabajan para nosotr@s (nuestros representantes políticos) ante este monumental aviso para navegantes.

Creemos y queremos que esto puede ser el inicio de una forma de vivir y convivir mucho más nuestra que dejarnos engañar por l@s de turno y votar por castigo.

Y como ahora la gente somos los medios (gracias @CecilioCean, siempre) y también podemos aprender mucho de estas experiencias, creo que lo importante es activarse: el resto, es cosa de tiempo, paciencia y confianza.

Somos un latido imparable. Marcamos un ritmo de actividades, eventos y acciones de todo tipo, sorprendente y desbordante. Si seguimos sumando y aprendiendo de nuestra diversa manera de ser y entender nuestra diversa manera de pensar y hacer, aumentarán nuestros logros. Y ésa también es la clave. Seguir y aprender.

Saludos y nos vemos donde y como siempre.